El candidato Jorge Astiazarán Orcí nos envió la respuesta a la pregunta 4. Se recibió esta
documentación el día jueves 20 de Junio.
Pregunta: Es de reconocerse que, en materia de seguridad pública y procuración de justicia, se han abatido de manera importante los índices delictivos en el Estado, sin embargo, en materia de prevención del delito, no se ha hecho lo suficiente para prevenir la comisión de estos; por otro lado, cerca del 90% de los delitos no son sancionados.
¿De qué manera se compromete a involucrar a la sociedad civil en materia de prevención del delito?, ¿Qué propuesta tiene para que más delincuentes sean sancionados?
En el contexto de las funciones del Estado, la relación de gobierno y ciudadanía se encuentra íntimamente ligada, especialmente cuando se trata de los grandes temas de atención pública como lo es el de la Seguridad y la Prevención del Delito. De tal suerte que el Presidente Municipal en turno no puede abstraerse de la obligación constitucional de atender la Prevención del Delito, en términos de lo que dispone el artículo 26 de la Constitución Federal que establece los mecanismos de la Participación Ciudadana.
Bajo esa premisa, el vínculo entre gobierno y ciudadanía, es decir, el que “involucra” a la sociedad civil, nace desde las campañas políticas en las que el candidato escucha las demandas más sentidas y recibe las propuestas de solución En base a ellas y a los compromisos hechos, una vez que se inicia el periodo constitucional de gobierno municipal y conforme lo establece el marco legal, se realizan las consultas ciudadanas para la formulación del Plan Municipal de Desarrollo.
Ahora bien, en el caso de nuestra candidatura, hemos decidido ir mas allá de ese acercamiento al que hacemos referencia, ya que nos hemos propuesto regresar a la sociedad civil, el espacio de participación que requiere todo gobierno para legitimar sus acciones.
Considero que no se pueden proponer políticas para la prevención del delito sin la opinión y participación de la sociedad civil. Las acciones en materia de prevención del delito deben formularse a partir de lo que sucede en el núcleo familiar, en las escuelas, en las colonias, en lo que perciben los organismos de la sociedad civil. No es casualidad que la Secretaria de Seguridad Pública Municipal cuente con una dirección que se denomina “Prevención del Delito Y Participación Ciudadana”.
Por eso, he anunciado públicamente mi compromiso en ese sentido, es decir, propongo un programa de gobierno en el que la participación ciudadana será fundamental, será el eje trasversal de los grandes temas rectores, entre ellos, una de los más importantes es el de la Seguridad Publica y Prevención del Delito.
Nosotros reconocemos que una de las razones de la descomposición social, si bien es multifactorial, tiene que ver con la pérdida de valores del individuo, por lo que consideramos que es ahí donde debemos de empezar, y para ello, daremos un gran impulso a la realización de campañas institucionales para el fortalecimiento de los valores como la solidaridad y la honestidad, por citar algunos. Creemos que, en lugar de ejercer presupuestos para la imagen y promoción del gobierno de la Ciudad, habremos de ejercerlo en campañas de sensibilización a la ciudadanía, para lo cual también sumaremos a los medios de comunicación y organismos civiles que quieran sumarse a la propuesta. Siempre hemos creído que el tema de prevención como el de seguridad, requiere de una atención integral pero además trasversal, en el sentido de sumar como estrategia preventiva, los programas de arte, cultura, deporte, el rescate de espacios publicos y todas aquellas actividades que alejen a los niños y jóvenes de las drogas como el factor de delincuencia más importante.
Por otra parte, no menos importante es la atención que debemos dar a la Secretaria de Seguridad Pública Municipal como una Institución que responda a las necesidades de la Ciudad y para ello proponemos un incremento sustancial del cuerpo policías, para lo cual estaremos de la mano con la Academia de Policía promoviendo su certificación e incorporación a las filas de la seguridad pública municipal.
Por su parte, el equipamiento de la policía, específicamente en el rubro de la tecnología es fundamental para su desempeño en materia de prevención del delito. Me refiero a cámaras de vigilancia en más espacios estratégicos de la Ciudad; radio localizadores en patrullas para efecto de reacción inmediata y todos aquellos instrumentos que con recursos Subsemun se requieran para que la policía responda a las demandas sociales.
Proponemos establecer de figura del “Policía de Barrio”, es decir, regresar al policía a la colonia, ya que sigue siendo el lugar en donde estadísticamente se ubican el mayor número de delitos de fuero común como el robo. Que el ciudadano conozca y reconozca a su policía, para lo cual, habremos de establecer los mecanismos de su implementación a partir de la solicitud de los colonos organizados.
Proponemos igualmente institucionalizar la figura del alcoholímetro y cero tolerancia, para lo cual convocaremos a organizaciones ciudadanas de jóvenes para el acompañamiento en programas de “conductor designado” en casos en los que se requiera regresar a un sujeto alcoholizado a su domicilio particular.
Finalmente, nos hemos propuesto, de llegar a la Presidencia Municipal de Tijuana, la adquisición de un helicóptero más para una Ciudad que tanto lo requiere, en virtud de las grandes distancias de una zona a otra aunado con la mala orografía de nuestra Ciudad, que muchas veces dificultan el traslado inmediato al lugar de los hechos para una eficaz atención y reacción inmediata a que está obligada la policía.
Si bien la sanción a los delincuentes es estrictamente del ámbito Federal y Estatal, reconocemos que en muchos de los casos en la comisión de un delito interviene en una primer instancia el Policía Municipal, por lo que de nuestra parte, como Ayuntamiento proponemos que de llegar a la Alcaldía de la Ciudad, habremos de redoblar esfuerzos en la capacitación de la Policía quien al atender un hecho delictivo en flagrancia, deberá ser acuciosos y contundente en la presentación de los informes que sirvan de sustento a las averiguaciones previas, rindiendo su parte informativo claro y firme, que no permita una “duda razonable” que permita beneficios al presunto delincuente. Para ello, será necesario firmar convenios de colaboración en materia de capacitación con las Procuradurías de Justicia del Estado y Federación.
